El pasado domingo 13 de octubre, el equipo junior del BAZU Baloncesto Azudense se enfrentó al Baloncesto Talavera en un partido disputado a las 12:00 h en Talavera. Aunque el resultado final no fue favorable, con un marcador de 100-48 a favor de los locales, el equipo mostró momentos de buen juego y aspectos en los que seguir construyendo.
El encuentro comenzó con un ritmo muy elevado. Desde el primer minuto, se hizo evidente la dificultad de nuestros jugadores para encontrar el acierto tanto en los tiros exteriores como en las penetraciones. Además, la defensa presentó problemas de ajuste en las ayudas, lo que permitió a Talavera anotar con facilidad. Sin embargo, empezaron a verse destellos de buen juego en equipo y algunas mejoras ofensivas. A pesar de esto, el primer cuarto terminó con un contundente 28-6 en contra, reflejando la superioridad inicial de los locales.
En el segundo cuarto, el BAZU Junior hizo algunos ajustes defensivos que dieron resultado. El equipo consiguió contener mejor a las estrellas de Talavera, cerrando espacios y defendiendo con más intensidad. Además, se buscó aprovechar las superioridades y se movió el balón con mayor fluidez, lo que permitió generar mejores oportunidades de tiro. Esta mejora se tradujo en un buen rendimiento defensivo en algunas situaciones clave, lo que nos permitió ganar el parcial del cuarto. Al término de la primera mitad, el marcador era 40-20, dejando ver una clara mejoría en el juego colectivo.
La segunda parte fue otro desafío. En el tercer cuarto, volvieron a aparecer problemas de toma de decisiones, y el equipo cayó nuevamente en el individualismo, lo que nos alejó del buen juego mostrado en el segundo periodo. Además, la gran calidad de los jugadores de Talavera se hizo notar, especialmente la actuación de su jugador de 2,04 metros, que dominó el poste bajo y nos causó muchos problemas a pesar del esfuerzo de nuestros defensores. El cuarto terminó con un 67-32, una diferencia que complicaba las esperanzas de remontada.
El último cuarto fue quizás el más difícil para el equipo. Se notó la frustración en algunos de los jugadores, y aunque intentaron mantener la intensidad y no rendirse, la mala toma de decisiones continuó afectando nuestro juego. Aun así, hubo esfuerzo por seguir ejecutando jugadas y mantener un buen baloncesto hasta el final, pero las cosas no terminaron de salir como esperábamos. Talavera siguió ampliando su ventaja, y el partido concluyó con un 100-48 en el marcador.
A pesar del resultado abultado, este partido no debe quedar en el olvido. Hubo momentos de buen juego y mejoras defensivas que debemos tomar como base para seguir creciendo. El equipo sigue en un proceso de aprendizaje y crecimiento, y la clave está en continuar trabajando y corrigiendo errores. Como siempre, partido a partido, con el objetivo de mejorar y avanzar.
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