Jornada muy exigente para el BAZU Baloncesto Azudense Junior U19 Femenino en su visita a la pista del Baloncesto Talavera. El 66-38 final refleja un partido en el que el esfuerzo físico no bastó para equilibrar una defensa local asfixiante y una mañana muy desacertada desde la línea de tiros libres.
Desde el salto inicial, el encuentro quedó condicionado por la intensidad defensiva del conjunto talaverano. El rival planteó una defensa a toda pista muy agresiva que se convirtió en la tónica del choque, dificultando la subida de balón y restando claridad en la toma de decisiones. El equipo azudense tuvo que invertir mucha energía simplemente para cruzar medio campo, lo que lastró la circulación de balón y la capacidad de generar buenas situaciones de tiro.
Pese a las dificultades, el BAZU logró mantenerse vivo en el partido durante la primera parte, llegando al descanso con un 27-18 que todavía dejaba margen para la reacción. Sin embargo, el desgaste acumulado ante la presión terminó pasando factura, especialmente en el último cuarto, donde un parcial de 24-9 rompió definitivamente el encuentro y disparó la diferencia en el marcador.
Más allá del mérito de la defensa rival, la clave estuvo en los puntos que se escaparon por el camino. La actuación desde la línea de personal fue determinante: el equipo firmó un 10/28 en tiros libres (35%), dejando escapar 18 puntos en un partido de anotación baja. A ello se sumó un 25% en tiros de dos (11/43) y un 16% en triples (2/12), porcentajes que reflejan la incomodidad con la que se lanzaron la mayoría de los tiros debido a la intensidad defensiva local.
A pesar de no haber llegado a mandar en el marcador en ningún momento, el BAZU mostró carácter en el segundo y tercer cuarto, donde consiguió contener mejor la producción ofensiva de Talavera y mantenerse competitivo. El duelo deja lecciones claras para el futuro: seguir trabajando la salida de presión, mejorar la gestión del ritmo de partido y, sobre todo, recuperar la confianza desde la línea de tiros libres de cara a los próximos compromisos.
Derrota dura en el marcador, pero valiosa en experiencia para un grupo que demostró orgullo y voluntad de competir hasta el final. Ahora toca levantarse, corregir errores y mirar adelante.
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